Guía Completa para Invertir en Acciones: Desde Principiante hasta Experto
Invertir en acciones es una de las formas más antiguas y a la vez más dinámicas de hacer crecer el capital. Para algunos es una fuente de ingresos pasivos a largo plazo, para otros una oportunidad de especulación rápida, y para muchos simplemente una manera de resguardar valor frente a la inflación.
Aunque la idea es simple, el mundo de las acciones tiene distintos niveles de complejidad. No es lo mismo empezar desde cero que ya tener experiencia. Tampoco es igual invertir en una empresa gigante como Apple que en una startup que recién cotiza en bolsa.
En este artículo vamos a dividir la explicación en tres partes:
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Lo que debe saber alguien que nunca invirtió en acciones.
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Lo que debe saber alguien que ya tiene cierta idea.
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Lo que debe saber alguien con experiencia avanzada.
Lo que debe saber una persona que nunca invirtió en acciones
¿Qué son las acciones?
Las acciones son participaciones en una empresa. Cuando comprás una acción, te volvés dueño de una parte (aunque mínima) de esa compañía. Si a la empresa le va bien, tu acción sube de precio y podés venderla más cara. Algunas empresas también reparten ganancias en forma de dividendos, lo que significa que recibís dinero simplemente por ser accionista.
¿Qué se necesita para empezar?
- Un broker: es una plataforma o intermediario financiero que te permite comprar y vender acciones. Algunos brokers son internacionales (ej. Interactive Brokers, eToro), y otros locales (dependen de cada país).
- Una cuenta bancaria para fondear el dinero con el cual comprarás acciones.
- Conocer las leyes de tu país: en muchos países las inversiones en bolsa están reguladas y tienen impuestos sobre las ganancias. Antes de empezar, es clave saber qué impuestos se aplican y cómo declararlos.
Riesgo y ejemplos de empresas
No todas las acciones son iguales, cuando se habla del riesgo al invertir en algo se habla de las posibilidades de perder capital, entonces empresas de:
- Bajo riesgo: son empresas grandes, conocidas como blue chips; son empresas ya consolidadas que tienen décadas de existencia, ingresos millonarios, diversificación de productos, generan ganancias constantes y tienen reservas en efectivo y además si necesitan financiamiento los bancos y mercados los financian porque confian en su solvencia. Ahora bien, bajo riesgo no es sinónimo de cero riesgo: una gran empresa puede bajar de precio en la bolsa por meses o años por causas como crisis económicas, caída en las ventas, regulaciones, etc. pero es poco probable que pierdas todo tu capital. Ejemplos: Apple, Microsoft, Johnson & Johnson, Coca Cola, Nike. Son compañías consolidadas, con décadas en el mercado, productos globales y estabilidad.
- Riesgo medio: empresas innovadoras o en crecimiento, pero con cierta volatilidad. Ejemplo: Tesla, Mercado Libre, Samsung, Netflix, Nvidia. Pueden subir mucho en poco tiempo, pero también caer bruscamente.
- Riesgo alto: empresas pequeñas, poco conocidas o startups cotizando en bolsa. Ejemplo: compañías regionales de electrodomésticos como “Liliana” en Argentina, Rivian: fabricante de autos eléctricos o nuevas tecnologías listadas en mercados secundarios. Suelen atraer por la posibilidad de multiplicar el capital, pero también puedes perder todo.
En resumen, el riesgo que estés dispuesto a correr se puede comparar con el seguro de auto que contratas:
- alto riesgo: sólo contratas el seguro obligatorio contra terceros.
- riesgo medio: al seguro obligatorio le agregas el de destrucción total.
- riesgo bajo: contratas el seguro total.
Mentalidad inicial
Al invertir por primera vez es clave entender:
- Puedes perder parte o todo tu capital. Por lo que debes empezar con montos bajos. Hay empresas que permiten empezar con fracciones de una acción.
- No hay ganancias garantizadas.
- No se trata de “jugar” como en un casino: aunque haya azar, también hay análisis y fundamentos. Es muy útil empezar con empresas conocidas de productos que consumas o entiendas.
- Investiga la legislación de tu país (impuestos, reglas de inversión). Elige un broker confiable y regulado.
En resumen: para el principiante, lo más recomendable es empezar con montos pequeños, invertir en empresas grandes y estables y usar un broker regulado.
Lo que debe saber una persona con cierta idea de inversiones
Una vez que superaste la etapa de principiante y entiendes cómo comprar y vender acciones, aparece un nuevo nivel: gestionar riesgo y diversificar.
Diversificación: no pongas todos los huevos en la misma canasta
Invertir todo en una sola acción es extremadamente riesgoso. Si esa empresa cae, pierdes gran parte de tu dinero. La solución es la diversificación:
- Combinar acciones de bajo, medio y alto riesgo.
- Diversificar por sectores (tecnología, salud, energía, finanzas).
- Diversificar por regiones (EE.UU., Europa, Asia, Latinoamérica).
Cómo elegir una empresa
- Fundamentos: mirar balances, ganancias, deudas y crecimiento.
- Industria: entender en qué sector opera (tecnología, salud, energía).
- Competencia: comparar con rivales (ejemplo: Apple vs. Samsung).
- Plan de negocio: empresas que innovan suelen crecer más, pero también son más volátiles.
Ejemplo de inversión:
- 40% - 50% en blue chips (Apple, Johnson & Johnson).
- 35% - 45% en empresas de crecimiento (Tesla, Mercado Libre).
- 5% - 10% en acciones especulativas pequeñas.
Brokers y comisiones
En este punto, el inversor intermedio ya compara brokers:
- Algunos ofrecen más mercados internacionales.
- Otros tienen comisiones más bajas.
- Algunos brindan investigación y herramientas avanzadas (ej. gráficos técnicos). Es importante empezar a conocer conceptos como:
- Ganancia de capital: la diferencia entre el precio de compra y el de venta.
- Volatilidad: cuánto sube y baja una acción en poco tiempo.
- Liquidez: qué tan fácil es comprar o vender una acción sin que el precio cambie mucho.
Aspectos legales e impositivos
El inversor intermedio debe informarse sobre:
- Retenciones impositivas por dividendos (ejemplo: en EE.UU. suele ser 30% para extranjeros, salvo convenios).
- Impuesto a las ganancias de capital en su país.
- Declaración anual de inversiones para evitar multas.
Lo que debe saber una persona con experiencia en inversiones
El inversor avanzado ya maneja montos importantes y busca estrategias sofisticadas. Aquí las reglas cambian: no basta con comprar y esperar, se trata de optimizar rendimientos.
Estrategias avanzadas
- Trading con margen: invertir con dinero prestado por el broker. Riesgo muy alto, solo para profesionales.
- Opciones financieras: comprar “calls” o “puts” para especular con subas o bajas sin comprar la acción completa. Se trata de contratos financieros denominados derivados, cuyo valor depende de una acción; por ejemplo un “Call” es el derecho a comprar una acción a cierto precio en el futuro, mientras que un “Put” es un derecho a vender una acción a cierto precio en el futuro. En este punto se incluyen inversionistas que ya poseen acciones y vende opciones “Call” para generar ingresos extras, a esto se le denomina “Covered call”.
- Cobertura (hedging): usar derivados o activos como el oro para proteger la cartera en crisis. En resumen, se denomina “Hedging” a invertir en acciones de otro tipo como metales preciosos o utilities para equilibrar si las acciones en empresa bajan.
- Análisis técnico y fundamental combinado: no solo mirar balances, sino también gráficos, tendencias y patrones de mercado.
Ejemplos de empresas por nivel de riesgo avanzado
- Bajo riesgo: seguir con blue chips, pero usando derivados para mejorar el rendimiento. Ejemplo: Apple con covered calls.
- Riesgo medio: tecnológicas innovadoras que ya demostraron solidez, como Nvidia, Shopify, AMD.
- Riesgo alto: invertir en empresas que recién salen a bolsa (IPOs) o en sectores de moda (biotecnología experimental, inteligencia artificial muy incipiente).
Brokers y plataformas profesionales
En este nivel, el inversor ya no usa aplicaciones simples. Busca brokers con:
- Acceso global a múltiples bolsas.
- Herramientas de análisis en tiempo real.
- Capacidad de operar derivados y margen.
Además en estos casos los brokers suelen pedir un margen mínimo en la cuenta.
Aspectos legales
El inversor avanzado debe conocer:
- Convenios internacionales de doble imposición por ejemplo con Estados Unidos para evitar pagar impuestos dos veces.
- Reglas sobre cuentas offshore (en otro país) y bancarias para manejar inversiones globales.
- Regulaciones locales sobre capitales en el exterior.
Conclusión
Invertir en acciones es una oportunidad real de crecimiento, pero requiere diferentes enfoques según el nivel del inversor:
- Principiante: debe investigar la legislación de su país, comenzar con montos bajos y empresas grandes y conocidas, y usar la experiencia para aprender.
- Intermedio: debe diversificar en empresas de distintos niveles de riesgo, investigar fundamentos y tendencias, y destinar porcentajes diferentes del capital según el riesgo.
- Avanzado: puede aplicar estrategias con derivados y coberturas, manejar carteras globales, y optimizar impuestos y riesgos, siempre con mayor capital y experiencia.
En todos los niveles, lo más importante es recordar que toda inversión en acciones implica riesgo. Lo que cambia es cómo se gestiona ese riesgo: el principiante con precaución, el intermedio con diversificación, y el avanzado con estrategias sofisticadas.
Es muy importante que diversifiques tu portafolio para hacerlo bien, vuelve a arrojar el oráculo para saber en qué más invertir y cómo hacerlo bien.
Glosario
Blue chips: son empresas ya consolidadas que tienen décadas de existencia, ingresos millonarios, diversificación de productos, generan ganancias constantes y tienen reservas en efectivo y además si necesitan financiamiento los bancos y mercados los financian porque confian en su solvencia.
Broker: es una plataforma o intermediario financiero que te permite comprar y vender acciones. Algunos brokers son internacionales (ej. Interactive Brokers, eToro), y otros locales (dependen de cada país).
Call: Es un contrato financiero denominado derivado cuyo valor depende de una acción en este caso es el derecho a comprar una acción a cierto precio en el futuro.
Cap rate: tasa de capitalización, un indicador de rentabilidad anual de la inversión inmobiliaria.
Cash flow: flujo de dinero mensual generado por la propiedad después de gastos (alquileres – impuestos – mantenimiento).
Certificados de Depósito (CDs): "similares a los plazos fijos, pero usualmente emitidos por bancos o entidades financieras en mercados más formales o internacionales. Permiten invertir en monedas locales o extranjeras. Pueden tener opciones de interés fijo o variable, dependiendo del contrato.
Commodities: son cualquier producto básico, homogéneo y comercializable que se produce en grandes cantidades y se negocia en mercados globales. Se utiliza tanto para consumo directo como para producción industrial.
Contratos de futuros: Acuerdos para comprar o vender una cantidad de activo a un precio fijo en el futuro.
Covered bonds: bonos respaldados por activos específicos, menos riesgo que bonos corporativos normales.
Covered Call: Son inversionistas poseedores de acciones que venden opciones "Call" para generar ingresos extras.
Cuentas offshore: son cuentas abiertas en otro país, usadas por algunos inversores para acceder a productos no disponibles localmente o por ventajas fiscales. Es legal si se declara, pero cada país tiene sus propias normas.
Cuentas remuneradas: cuentas bancarias que generan intereses diarios o mensuales sobre el saldo disponible.
ETF: es un fondo de inversión que se compra y se vende en la bolsa como si fuera una acción.
ETFs apalancado: multiplican los movimientos del mercado (2x o 3x). Para arriba o para abajo.
ETFs inversos: ganan valor cuando el índice al que siguen baja.
Fondo Común de Inversión (FCI): es un vehículo colectivo donde varias personas aportan dinero que luego un administrador profesional invierte en diferentes activos financieros: acciones, bonos, commodities o una combinación de ellos.
Hedging: Invertir en acciones de otro tipo como metales preciosos o utilities para equilibrar si las acciones en empresas bajan.
High yield / junk bonds: empresas pequeñas o con problemas de liquidez, alto riesgo y alto rendimiento.
Joint ventures: asociaciones entre dos o mas partes para desarrollar un proyecto conjunto, compartiendo riesgos, costos y ganancias
Leverage / apalancamiento: usar financiamiento (hipoteca o préstamo) para comprar más propiedades de lo que tu capital permitiría.
Liquidez: en economía, la liquidez es la facilidad con la que un activo se puede convertir en dinero efectivo sin perder su valor.
Microcaps: son criptomonedas muy pequeñas en capitalización de mercado ya que son proyectos nuevos o desconocidos que tienen el potencial de multiplicarse por 100 pero también el riesgo de desaparecer de un día para otro.
Minería (Bitcoin): Usar computadoras para validar transacciones y obtener recompensas. Los mineros compiten, gastan electricidad, y reciben recompensas en BTC.
Plazos Fijos: depositar dinero en un banco por un período determinado, a cambio de una tasa de interés fija. Al finalizar el plazo, recuperarás tu capital más los intereses.
Portafolio: es el conjunto total de activos financieros (como acciones, bonos, fondos comunes de inversión o bienes raíces) que pertenecen a un inversor o entidad, con el fin de alcanzar metas financieras específicas mediante la diversificación y la gestión del riesgo.
Put: Es un contrato financiero denominado derivado cuyo valor depende de una acción en este caso es el derecho a vender una acción a cierto precio en el futuro.
REITs (Real Estate Investment Trusts): Son fondos inmobiliarios que permiten invertir en grandes portafolios sin comprar directamente la propiedad. Se invierte a través de brokers como si fueran acciones normales e incluso existen ETFs de REITs.
Staking: Algunas blockchains (Ethereum, Cardano, Solana) permiten “apostar” tus monedas en la red y recibir intereses (staking). Esto genera un ingreso pasivo parecido a un plazo fijo, pero con más riesgo.
Swaps de tasas: es un contrato financiero entre dos partes para intercambiar pagos de interés sobre un capital nocional. Lo más común es intercambiar tasas fijas por tasas variables de interés o futuros.
Unidad de participación: cuando aportas dinero a un FCI, recibes “unidades” que representan tu participación proporcional en el portafolio.
Validación (Ethereum y otras proof of stake): bloquear grandes cantidades de monedas para mantener la red y recibir recompensas.
Valor Cuota (NAV – Net Asset Value): el precio de cada unidad, que fluctúa según el valor de los activos del FCI.